Soy un fraude | El síndrome de la impostora

Recibo una llamada, un email o veo una oferta de trabajo en la que podría encajar  y automáticamente pienso, y si no sé hacerlo bien. No es lo mismo ponerme detrás de mi pantalla y contaros todas estas cosas, estar presente en las redes y seguir a mi ritmo, que tener entre mis manos algo más importante y serio. ¿Por qué me hago esto? ¿por qué dudo de mi capacidad de trabajo, de mis habilidades? ¿ Por qué siento que cada vez que puedo dar un paso más allá no voy a saber hacerlo y me siento como si estuviera defraudando a otras personas?

Esto no es algo que me pase solo a mí ni a ti. Muchas mujeres de mi entorno con las que he hablado de esto han coincidido conmigo en que al afrontar una nueva situación profesional, se sienten inseguras, dudan de sí mismas y se replantean si sus capacidades son lo suficientemente buenas. En una de estas conversaciones sobre este tema que a todas nos preocupa y contra el que luchamos, salió el término con el que se denomina:  Síndrome de la impostora.

El Síndrome de la Impostora se refiere a la falta de autoestima para desempeñar un puesto en espacios principalmente masculinos; quien lo sufre se siente obligada a esforzarse mucho más de lo habitual. La socialización diferenciada, por la cual hombres y mujeres son educados en roles distintos y en valores distintos, crea el caldo de cultivo perfecto para que las mujeres sientan de forma masiva el síndrome de la impostora. Y esto es lo que ocurre, que muchas mujeres dudan de si podrán o no «dar la talla» en su carrera profesional. Una baja autoestima o una excesiva auto-exigencia influye en este sentimiento por el cual una persona se ve menos cualificada para un puesto, cargo o desempeño dado, que sus compañeros. Según Coral Herrera, doctora en Humanidades y experta en Género y Comunicación, afirma en la revista S moda que “nuestra cultura patriarcal nos enseña que las habilidades femeninas no tienen tanta importancia como las masculinas. Por eso hay labores de cuidado, crianza y domésticas que no se pagan, ni tienen valor social, aunque son imprescindibles para la supervivencia”. Por ello, desde su perspectiva, “el síndrome de la impostora tiene mucho que ver con esta idea de que los hombres lo hacen todo mejor. Hay estudios que explican que las niñas, a partir de los 5 o 6 años, ya tienen la sensación de pertenecer a un grupo inferior. Para ellas las mujeres pueden hacer cosas buenas, pero son los hombres los que destacan”.

En el mismo artículo la psicóloga y sexóloga Cristina Callao dice que «es posible que las personas que sufren este síndrome tengan problemas gastrointestinales, jaquecas, tensión o dolor muscular, insomnio, apatía, conductas de desorden en los hábitos alimentarios, etc. ya que no sabemos manejar estos problemas de autopercepción, autorrealizamiento y perfeccionismo, generalmente por desconocimiento de lo que nos ocurre y nuestro cerebro tiende a manifestar esa angustia en algo palpable».

El síndrome de la impostora es parte de una construcción social mediante la cual  las necesidades femeninas son menos importantes que las masculinas, por ello algunas mujeres se sienten obligadas a exigir menos, o nada, pero siempre dar más y sus capacidades profesionales son puestas en duda y atribuidas a la suerte o a algún otro factor, olvidando y despreciando el esfuerzo personal de las mujeres.

Por lo general el síndrome de la impostora se atribuye a mujeres con éxito profesional, pero yo creo que no es así, que cualquiera de nosotras realizando cualquier trabajo puede tener este sentimiento. Silvia Nanclares lo explica muy bien en este artículo para el diario.es.

Fuimos niñas de primera fila, a veces de última, porque el malotismo siempre da puntos sociales y hay que saber estar un poco en todo. De mayores invertimos horas y sacrificios para conseguir esos títulos, ese trabajo, esa sensación de bienestar profesional y, ¿ahora vamos a dudar de nuestras capacidades? no, me niego. Como con muchas otras cosas a veces nos asaltan pensamientos que creíamos destruídos pero que nos hacen ver cuánto pesa la educación y el entorno social en el que vivimos. Ya somos fuertes para arrancárnoslos de raíz y reconstruirnos una autoestima y autopercepción mejorada. En el terreno profesional no es diferente. Refuerza tu lado positivo, reconoce lo que se te da bien o mal y quiérete. Quiérete a través de los halagos a tus méritos, déjate halagar y ten presente que cada unx de nosotrxs es diferente, con sus características y que nadie debe ser peor que nadie porque el aprendizaje es continuo y hay tiempo para mejorar y si es el caso para plantarle al detractor de turno nuestras capacidades a la cara.

Lo sé, en la teoría queda muy bonito, pero la realidad es otra. Lo importante es tenerlo presente y ser conscientes de ello porque así habrá oportunidad de mejorar.

Experiencias con la copa menstrual

¿Os acordáis de cuando nos bajaba la regla durante la adolescencia y todo eran dudas? Que si la compresa se notaba demasiado a través de la ropa y te mirabas mil veces al espejo, las vueltas que les dábamos a los tampones buscando una explicación a cómo meternos esas cosas… las dudas generadas por si desprendíamos un olor extraño. Las constantes preocupaciones por si nos habíamos manchado la ropa. Las escapadas al baño con el tampón o la compresa en el bolso bajo el brazo o protegiéndolo con la mano para que nadie sospechara qué es lo que íbamos a hacer al servicio… Tal vez no todas tuvimos las mismas inseguridades o dudas, pero creo que es algo general ese miedo infundado que recibíamos de nuestro entorno y, sobre todo, de los anuncios de televisión. Ahora, mirando atrás, nos hace gracia ver que «tontas» éramos haciendo esas cosas e importándonos lo que los demás vieran o pensaran. Sin embargo, aún sigo viendo a chicas no tan jóvenes que emprenden todo un dispositivo cuando van al baño para cambiarse. Y esto me hace preguntarme si hemos cambiado algo la forma de educar a las niñas sobre su menstruación o por el contrario, siguen existiendo los mismos temores.

Hasta no hace mucho las compresas o los tampones (salvo si te decantabas por un paño a la antigua usanza) han sido las únicas opciones a las que hemos recurrido durante nuestros días de regla. Pero un día todo esto cambió. Apareció la Copa menstrual que nos prometía una menstruación más sostenible, ecológica, cómoda y barata. He de admitir que al principio todo eran dudas rememorando los días de adolescencia. Pero todas estas dudas se me han disipado cuando me he lanzado a utilizarla. Estaba decidida a comprar una y probarla y por supuesto contaros mi experiencia y fue entonces cuando la sexóloga Cristina Callao en colaboración con la tienda online Haz el amor y no la guerra publicaron un concurso para ganar una IrisCup. Últimamente estoy muy afortunada en esto de los sorteos, así que fui la ganadora de una de ellas. Al día siguiente ya la tenía en casa. Tras unos días de impaciente espera, sí nunca había tenido tantas ganas de que me bajara la regla, tuve la oportunidad de probarla.

Lo primero de todo es que me pareció fantástico que junto a la copa viene una bolsa para esterilizarla en el microondas. Tiene 20 usos y es una maravilla porque facilita mucho el trabajo. Es perfecta para períodos vacacionales, ya que así puedes hacerlo en prácticamente cualquier parte y sin tener que usar nada más. Tan solo hay que verter 60ml de agua potable en la bolsa, metes la copa (puede usarse para más cosas), la cierras herméticamente y al micro. Tras dos minutos de espera cuando haya parado el temporizador, dejas escapar el vapor por uno de los laterales de la bolsa. La parte de arriba es la zona segura donde tocar para no quemarse. Una vez que ha salido todo el vapor se puede tirar el agua y ya está, copa esterilizada y lista para usar. También se puede esterilizar la copa en un cazo al fuego.

Una vez que tuve la copa lista para usar llegó el momento de cogerle el truquillo a cómo ponérmela bien. Una cosa que hice y que aconsejo si eres primeriza en esto de la copa menstrual es utilizarla primero en casa. Porque así si no estás cómoda o te cuesta adaptarte a ella, no hay problema. El primer paso para colocarla es estar relajada. Sentirse cómoda. Lávate las manos y empieza a manipularla. Tócala y ve como es muy flexible. Pruébala en la mano, así verás como se adapta a cualquier hueco. Si lo hace fuera también lo va a hacer dentro de ti. Yo seguí las indicaciones que da IrisCup, el fabricante, y resultaron ser muy acertadas. Primero la mojé con un poco de agua y la doblé hacia sí misma de forma vertical. Luego con la otra mano la volví a plegar sobre sí misma. Así:

Una vez doblada ya está lista para la inserción. Si con el agua no te basta, puedes utilizar un poco de lubricante al agua. En mi caso con el agua fue suficiente. Resbala muy bien y se mete con facilidad. Vale, ya está dentro. No es necesario meterla mucho. Tan solo que notes que se queda en el hueco y que su rabito te queda fuera.

*Nota importante: No cortes este rabito hasta que no la hayas usado repetidas veces y veas cómo te queda y te apañas para retirarla. Esto es muy importante porque si te pasas cortándolo y luego se mete demasiado va a ser difícil quitarla. Lo más importante, no te pongas nerviosa. Busca la posición más cómoda para ti. Túmbate, siéntate, ponte en cuclillas… como veas que sea más fácil. Yo tan solo flexioné las piernas un poco. Como si estuviera sentada a medias.

Y tras ponerla es donde surge la primera duda: ¿cómo se que está bien colocada y no se va a escapar nada? Una vez que está metida y que la sientes cómoda, puedes pasar la punta del dedo justo al principio de la vagina. Vas a notarle la superficie nada mas tocar y que ya ha hecho ventosa. Aunque al insertarla estaba doblada, nada más meterla ella sola se expande y acopla a tu hueco. Recuerda que no es necesario que la empujes mucho. Comprueba su rabito que no te moleste y ya está. Ahora a hacer vida normal.

La primera vez que la usé fue para dormir. Me la coloqué como os acabo de decir y me fui a la cama. Es normal y natural tener dudas de si te la has puesto bien. Mientras estaba en la cama cada poco me tocaba a ver si se movía, si seguía en su sitio… pero parecía que todo iba correcto. A la mañana siguiente comprobé que no había manchado nada, así que era señal de que no lo hice mal (y eso que soy un poco torpe). Ahora toca operación salida. Excursión al baño, manos bien limpias y a ver cómo la saco. He de admitir que me puse un pelín nerviosa porque cuando la utilizo al cabo de un rato se me va bastante hacia dentro. Y al principio me daba un poco de cosilla por si no era capaz de sacarla bien. Agarro el rabito y empiezo a tirar. Noto bastante resistencia de mi cuerpo, pero, tal y como leí en las instrucciones, intento relajar los músculos para dejar que salga con fluidez. Es uno de los trucos. Otro es meter un dedo y romperle el vacío. La copa tiene unos pequeños orificios para ello. La aprietas un poco y pierde el aire y así sale mejor. Aunque la aprietes no suelta nada del líquido que contiene. Una de las cosas que me ocurre con la copa es que tiendo a lubricar, bien para su inserción, pero un poco incómodo a la hora de sacarla porque el rabito se me resbala. Entonces tiendo a usar las uñas, no es que las lleve demasiado largas, pero no es recomendable porque se puede dañar la silicona de la copa. Así que mejor usar las yemas de los dedos. La primera vez al quitármela me costó un poco, pero probé una cosa que he perfeccionado con el uso y que os recomiendo a las que os cueste expulsarla. En una posición cómoda, en mi caso como cuando vas al baño pero un poco elevada con las piernas flexionadas, al tiempo que comienzas a tirar de ella te relajas y empujas un poquito con los músculos vaginales. Y así sale prácticamente sola. Si aún así te cuesta, primero rómpele el vacío que antes mencionaba y luego haces esto. Ya verás como así sale perfecta. Y tranquila porque no se derrama nada. Yo ni me manché las manos.

Aunque al principio parece mucha parafernalia y mucho rollo, es más la literatura que luego en sí el acto. Es lógico que las primeras veces surjan dudas de si está bien, si se va a escapar y un poco de nervios al quitarla. Pero tranquilas, sobre todo hay que estar relajadas y ser pacientes, porque con el uso cada una va cogiendo sus trucos y viendo cómo es la mejor manera de ponerla y quitarla.

No se puede hacer un manual general para todas, porque cada una irá aprendiendo cómo lo hace mejor y cuál es la técnica que mejor se adapta a su cuerpo.

Tras superar estos primeros pasos su uso diario me ha resultado satisfactorio. Me he sentido cómoda llevándola puesta. Sí que al quitarla me ha costado encontrar la mejor manera para mí, pero creo que lo tengo. El uso en la calle también ha sido positivo. Como os decía al principio, sí creo que si no te sientes 100% cómoda o tienes dudas, la uses primero en casa o para hacer cosas que no te exijan vaciarla en baños públicos. Antes de utilizarla leí otras experiencias y sí que varias mujeres decían que es un poco «rollo» tener que ir al baño del trabajo o de un lugar público si éste no tiene el lavabo en el mismo hueco porque tienes que limpiarla con papel o te manchas las manos y tienes que salir así al lavabo común. En mi caso no he tenido ningún problema de este tipo. No mancha prácticamente nada y no se escapa de la propia copa. Aunque es cierto que yo tengo poco flujo. Como truco para estas ocasiones, puedes llevar un botellín de agua y así poder limpiarla en el propio WC. También se puede hacer con papel higiénico o un pañuelo y lista para usar. Otra solución es tener dos y cuando te cambies poner la limpia y lavar la sucia  al salir y guardarla en la bolsita de tela que viene con ella y así la puedes usar la siguiente vez. Como a la hora de ponerla, aquí cada una también encontrará su mejor opción.

En resumen, me ha gustado mucho utilizar la copa menstrual. Me he sentido muy cómoda con ella durante el día y durante la noche. Es fácil ponerla y quitarla cuando ya la has utilizado unas cuantas veces.

Puntos positivos de mi experiencia

  • Se adapta fácilmente al cuerpo.
  • Es totalmente inholora. No huele a nada ni antes ni después de su uso.
  • Aunque me daba miedo dañarla es muy resistente.
  • Es segura y cómoda (al menos en mi caso).
  • Es una opción sostenible y que reduce gastos. Al ser la primera vez sí hubo un periodo que descansé un poco. Además, los primeros días no estaba en casa y no la llevaba conmigo, así que utilicé otros recursos. Pero a pesar de ello, tan solo usé 3 tampones y 1 compresa en 5 días que me duró la regla.
  • Reduce la irritación y la sequedad, ya que solo recoge el flujo, no absorbe como en el caso de los tampones.
  • Se siente menos sensación de hinchazón.
  • Me ha gustado mucho ver lo que sale de mí. Ver qué es lo que realmente se desprende de nosotras. Con las compresas y tampones no se ve tan claro. Creo que es una experiencia positiva para reencontrarnos con nuestros cuerpxs menstruantes.

Puntos negativos

  • Si se tiene mucho flujo es mejor usarla primero en casa o en lugares que te sientas cómoda.
  • Puede ser un poco engorroso cambiarse en lugares públicos para limpiarla bien y volverla a colocar. Pero nada insalvable.

Espero que os sirva mi experiencia, si os animáis a contar la vuestra aquí tenéis un espacio donde poder compartir dudas, reflexiones y otras maneras de vivir la regla.

Os dejo este vídeo para que veáis mejor cómo utilizarla y sus beneficios de Serise Sexología

 

«Queremos que el que regale una de nuestras cajitas tenga claro que está generando muchas emociones»

Toc toc Llaman a la puerta. Miras a ver quién es y ves a una persona vestida con un uniforme de una empresa de paquetería. Abres, preguntan por ti, afirmas y te coloca en las manos una caja. Es de color tostado, te recuerda a las cajas hechas a mano para envolver regalos especiales. De esos que te esmeras para que que lo que rodea al interior sea igual de bonito que lo que va a descubrir dentro. La observas, la giras y encuentras en uno de sus laterales una frase Me quiero ¡y punto! 

Esto es lo que sucede cuando recibes una de las cajitas de La sonrisa de Marilyn, que la sonrisa lleva tu nombre. No lo puedes evitar, te ha conquistado. Igual que me conquistó a mi. La sonrisa de Marilyn es mucho más que una tienda online de regalos eróticos, es una declaración de intenciones, una iniciativa interesante y detallista. Es un propósito de cautivarnos con cada acto y en cada propuesta. En su web podemos encontrar productos eróticos, juguetes sexuales, cajas y frases. Si lo sumamos todo nos da como resultado una mezcla perfecta.

Si estás buscando ese regalo especial que hace tiempo que quieres hacerle a alguien, esta es tu oportunidad. Puedes elegir entre todos sus productos los que más se adapten a tu gusto o a tu presupuesto, coge una caja, mételos y ahora escoge el mensaje que quieres enviar. También puedes escoger entre las cajas ya confeccionadas. Solo necesitas una misión, por ejemplo sorprenderte a ti mismx, insinuarte a tu pareja, probar nuevas sensaciones, utilizar sus mensajes para decirle a tu amigx eso que hacía tiempo que querías decirle, o darles el empujón que necesitan a esa pareja que está empezando a caer en la rutina sexual. Seguro que tienes alguna excusa…

Te quedará algo así

sofá-manta-y-nosotras. Caja Marilyn

Pero además, ¿te imaginas que MaryAsexora, Cristina Callao, Lola Flor o María Savage te hicieran una cajita con sus productos preferidos?, pues La sonrisa de Marilyn lo ha conseguido. Ha trasladado la esencia de estas sexólogas y sexbloggers a unas cajas pensadas y creadas por ellas mismas.  Las frases que las acompañan bien lo reflejan.

¿A que ahora tienes ganas de conocer quién se encuentra detrás de todo esto? Ars Eroticas ha hablado con Delèric, fundador de La sonrisa de Marilyn para conocerles más de cerca e intentar descubrir la pasión que envuelve a su trabajo.

  • En primer lugar Delèric, no podemos dejar pasar esta oportunidad para preguntaros, ¿por qué este proyecto tan especial se llama La sonrisa de Marilyn?

Queríamos que en el nombre apareciera cualquiera de las emociones que queremos generar, y la sonrisa es la primera. Marilyn vino por la famosa frase de Marilyn Monroe: “El sexo forma parte de la naturaleza y a mí me encanta la naturaleza”. Aunque nuestra Marilyn nada tenga que ver ni física ni emocionalmente con la actriz.

  • Y, ¿cómo surgió esta gran aventura?

Después de un episodio de ansiedad que duró varios meses y me llevó a perder mi trabajo, después de 13 años en la misma empresa, decidí que quería dedicarme a generar positividad y emociones intensas. Mi mujer, que tiene su trabajo aparte, me apoyó desde el principio y me ayudó en la toma de decisiones. Queríamos contribuir, aunque fuese a una escala muy pequeña, en una sociedad menos “amargada” y mentalmente más sana.

  • En el mercado encontramos muchas opciones para enviar regalos y productos eróticos, ¿por qué una cajita como esta?

Nuestra idea principal consiste en divulgar y transmitir una manera de entender la vida, donde la sexualidad tiene un papel protagonista. Los que somos así lo hacemos continuamente, sin darnos apenas cuenta, en nuestras relaciones con los demás. Pero queríamos promover la “divulgación activa” de un sexo divertido, sano y emocionante. Y como a mi mujer le encanta hacer regalos y es una persona muy detallista, pensamos que cajitas de regalo con artículos eróticos sería una buena idea. Claro que ya existen tiendas que hacen cajitas eróticas, y muy bien por cierto. “Sexodivino” incluyen vino en sus cajitas. “Misensualbox” tienen hasta la opción de suscribirte y recibir periódicamente tu cajita erótica sorpresa. O sea, no pretendíamos inventar nada ni hacer competencia a webs que admiramos. Queríamos que nuestras cajitas tuvieran otra personalidad. Que simplemente al recibirla, y antes incluso de abrirla, ya te generara una sonrisa. Un regalo no sólo para tu pareja, también para amig@s o compañer@s de trabajo. Queremos que el que regale una de nuestras cajitas tenga claro que está generando muchas emociones.

  • Con todos los productos que hay en vuestra tienda, ¿cómo decidís qué incluir en cada caja?

Como acabamos de “arrancar” vamos tomando decisiones sobre la marcha. Nos gusta también escuchar y recibir consejos. Nadie nace enseñado y, como en cualquier otra faceta de la vida, la experiencia es un grado. Nos basamos en vivencias propias y ajenas o en situaciones comunes en casi todas las personas. La mayoría de cajitas están todavía por salir. Lo que tenemos muy claro es que las cajitas de Marilyn siempre incluyen artículos, ya sean juguetes o cosmética, de calidad. Y, preferentemente, marcas españolas y productos lo más “naturales” posibles.

  • Hay cajas que podemos crear con nuestras propias elecciones, cajas ya confeccionadas y una opción muy curiosa, cajas hechas y pensadas por sexólogxs y sexbloggers ¿por qué y cómo surgió esta opción?

Nosotros hemos estado siempre ligados al mundo comercial y al trato directo con las personas, por eso aunque ahora sea online, nos gusta que el cliente nos mande un whatsapp o un mail pidiendo ayuda para configurar una cajita. Es una manera de hacer lo que hacíamos antes, pero en otro sector y siempre con la finalidad de conseguir sorprender y superar las expectativas.

En cuanto a las cajitas personales de sex-bloggers o sexólog@s ha sido por experiencia propia. Hemos vivido en primera persona la gran calidad humana de los profesionales del sector y eso nos ha emocionado muchísimo. Y aquí entran sexólog@s, sex-bloggers, sex-shops, tiendas eróticas o cualquier web o blog dedicado a la divulgación de información relacionada con la sexualidad y el erotismo. Y si nosotros aprendemos de quienes más entienden, porqué no íbamos a confiar en ellos para que nos dijeran cuál sería la cajita regalo que querrían recibir. Se trata además, de acercar el erotismo y la sexualidad al público que normalmente no lo sigue. Que alguien decida regalar la cajita de una sex-blogger o una sexóloga y gracias a ello la conozca y decida seguirla, estará mejorando sin darse cuenta su vida íntima. Igual que ahora todo el mundo empieza a tener claro que debemos comer bien y hacer ejercicio, que nadie se olvide que también tenemos que follar bien. Y bien no necesariamente debe ser mucho. Así que #PonUnaSexbloggerEnTuVida o #PonUnaSexólogaEnTuVida.

  • Hasta el momento, ¿qué resultados estáis obteniendo?

Es pronto para hacer este tipo de valoraciones, pero las muestras y el movimiento que estamos teniendo nos invita a ser muy optimistas. Estamos muy contentos, la verdad. Pero también sabemos que esto es un proceso muy largo y que debe pasar mucho tiempo para que nos conozca el número de personas suficientes para empezar a pensar en ampliar ciertos aspectos del negocio. Dicho esto, todos los inputs que recibimos son positivos, aunque somos prudentes. Como debe ser.

  • ¿Hay alguna de las cajas de entre todas las que podemos ver en vuestra web que tenga más éxito?

No quiero que ninguna de nuestras amigas y colaboradoras se “enfade” jeje. Así que me lo guardo. Pero lo que más movimiento tiene es la cajita personalizada. Aunque repito, no podemos valorar nada llevando tan poco tiempo en el mercado. Somos unos recién nacidos, por así decirlo.

  • En una propuesta como esta en la que se juega con un packing muy atractivo y con unos productos diferentes, ¿qué es más importante para nuestra vida sexual el continente o el contenido?

Imagina que estás en tu trabajo y llega un mensajero. Te entrega una cajita a tu nombre en cuyo interior hay un móvil último modelo junto a una nota de tu pareja que dice: que lo disfrutes. ¿Qué pasada no?

Ahora imagina que estando en tu trabajo, de repente suena un claxon y al mirar a la calle ves a tu pareja en su coche parada en medio de la calle, de un solo carril. Sales a la calle mientras ella sale del coche sin dejar de mirarte, os vais acercando de manera impaciente hasta que, al juntaros, te besa intensamente mientras te sujeta las mejillas y al separarse te dice: te quiero, necesitaba decírtelo. Acto seguido se vuelve, pide perdón al resto de coches que esperaban detrás, y se marcha…

Espero haber contestado tu pregunta.

(Esta respuesta sí que nos hizo sonreír)

  • ¿Habéis pensado en cajitas dedicadas a las diferentes etapas de nuestras vidas sexuales y de pareja? Por ejemplo unas dedicadas a personas que se están conociendo o los que quieren huir de la rutina.

Sí, tenemos pensadas muchas opciones. El problema es que ahora Eva apenas tiene tiempo, pues su trabajo principal le ocupa casi todo el tiempo y además tenemos un niño de tres años y medio. Estoy bastante solo y las cajitas van saliendo despacio. Pero eso también cambiará. En breve sacaremos una cajita que sorprenderá bastante y que tratará una situación que nos coge muy de cerca…

  • Os felicitamos por las frases que habéis pensado para las cajitas. Además, hemos notado que habéis pensado en todo tipo de parejas. ¿De dónde sacáis la inspiración para crear mensajes tan originales?

Muchas gracias. Bueno, en realidad, muchas son frases que cualquiera le habrá dicho a su pareja en alguna ocasión. Otras han sido “regaladas” por amigos. Y las cajitas personales de sex-bloggers y sexólog@s son 100% de ell@s. Uno de los requisitos que les digo siempre es: Quiero que esa cajita hable de ti. Y la frase también, por supuesto.

  • Y para acabar ¿cómo valoráis esta gran aventura en la que os habéis zambullido? ¿nos podéis desvelar alguna sorpresilla que tengáis preparada?

Está siendo muy difícil de llevar por la falta de tiempo, el que uno de nosotros ahora tenga una tarea que le ocupa muchísimo tiempo y el papel de padres. Pero lo valoramos de una manera muy positiva. He vivido en mis carnes como una mente emocionalmente herida puede hacerte vulnerable y frágil. Como el estrés, la tensión y las emociones nocivas merman la capacidad vital de cualquier persona. Y Marilyn será un sencillo y humilde aporte para evitar eso en otras personas.

Y la sorpresilla. Pues tendremos una cajita para regalar a vuestra jefa o vuestro jefe.

Ha sido un placer conocer a La sonrisa de Marilyn, ahora os dejo algunas imágenes de sus productos para que vayáis abriendo boca.

 

«No debemos ser tiranos de nuestro propio cuerpo» Cristina Callao, sexóloga

El primer amor de toda persona debería ser siempre el amor propio

 Con esta frase Cristina Callao, psicóloga y sexóloga, da la bienvenida a todas y todos sus visitantes virtuales. Es la cabecera de su página web y el lema que la acompaña. Pero no es solo eso, es un mantra, una forma de vivir, de crecer, de conocerse y de mostrarse ante los demás.

Cristina tiene una trayectoria profesional larga y una formación muy completa. Es una mujer multitarea, y es que nos cuesta creer cómo le dan las horas del día para poder atender a todos los proyectos en los que participa. Los jueves a las 14:20 nos ofrece una visión profesional de las relaciones sexo afectivas junto a la también sexóloga, Valérie Tasso, en el programa A punto con la 2 de Tve. Forma parte del equipo de Placer con sentido, una iniciativa de Tuppersex realizada por sexólogas. Además, charla con Cris en Los cafés con Cris de la tienda erótica Belovez. Pero eso no es todo, porque también podemos encontrar a Cristina en las redes sociales como Facebook, Twitter o Google+ y en su propio blog, donde aborda temas muy interesantes.

Queremos conocerla más de cerca y conocer su opinión profesional, por eso le preguntamos a Cristina

  •  ¿Sexóloga clínica se nace o se hace?

En mi caso podríamos decir que se hace, yo tenía clarísimo que quería ser psicóloga, pues el mundo de la psique y el comportamiento humano siempre me ha fascinado. Pero lo de estudiar y profundizar más sobre la sexualidad humana surgió en la carrera. Es decir, descubrí que había una especialidad científica y rigurosa que se encargaba justamente de eso, de estudiar, conocer y aceptar un aspecto que está en nuestra biología y se modula y evoluciona con su contexto. La gran olvidada, vetada, sesgada y restringida sexualidad humana. Y, la verdad, no fue un hecho casual, pues la curiosidad yace en el humano desde el minuto cero de nuestra existencia y en materia sexológica, que parece ser que se habla de algo prohibido, algo sucio, algo adulto y ojo con salirte de la «norma». Así que en mi caso, mi historia empieza en la universidad, cuando no había profesor, solíamos estar juntos -o la gran mayoría- en las gradas de dentro de la facultad, se formaban grupitos y se hablaba de todo y en infinitas ocasiones el sexo era un tema de conversación. Enseguida vi que los hombres tomaban la batuta, explicaban intimidades, sin pudor y sin miedo, mientras las chicas nos reíamos de manera tímida y comentábamos alguna cosa -sin entrar en detalle, no fuese caso que…-. Al principio escuchaba atónita la de estereotipos y burradas que salían por sus bocas y pensé «Somos gente formada y estudiamos para ayudar a las personas en sus dificultades y la sexualidad no puede llegar a ser una dificultad si no se habla y se trata desde el conocimiento, el respeto y el cariño»  Y desde entonces busqué información veraz, hablé con profesores, me apunté a jornadas, a cursos homologados para encaminar mi trayectoria profesional.

  • ¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión?

Sin duda alguna lo que más me gusta es ayudar a las personas a encontrarse y vivir plenamente de su condición de ser sexuado, tanto en todo lo que concierne a su propia sexualidad, como las relaciones afectivas. Creo que es un tema muy interesante y que deberíamos trabajarlo desde la más tierna infancia. Pero lo hemos prohibido y estigmatizado hasta tal punto que sólo se concibe, y en escasas ocasiones, la sexualidad desde un ámbito clínico (médico) y no desde la educación. Por eso me gusta mi profesión, porqué me supone un reto, me entusiasma y que hace mucha falta trabajarlo desde diferentes ámbitos y con diferentes profesionales.

  • Podemos encontrarte en Twitter, Facebook, en tu página web… y ahora también en televisión junto con tu compañera de profesión Valérie Tasso. En uno de los encuentros que mantenéis en el programa Apunto con la 2 de TVE, hablasteis de fantasías sexuales. Fue curioso ver que no estabais muy de acuerdo ya que tú apostabas más por compartirlas y en la medida de lo posible llevarlas a cabo, mientras que Valérie mantenía otra posición. ¿Cómo repercute esta situación en nuestras vidas íntimas?, porque esta misma escena se puede dar en una pareja. Tal vez a una parte le apetece y le parece importante compartirlas pero la otra prefiere guardarlas para sí mismo/a.

Cierto, aquí vemos un claro ejemplo de cómo de importante es la comunicación para saber qué es lo que le gusta al otro, siendo importantísimo el respeto mutuo. Con esto quiero decir que sí, que las fantasías forman parte de nuestro imaginario erótico y, a mi entender, no hay nada de malo en quererlas compartir con nuestra pareja. Luego se pueden llevar o no a cabo, pero el poder hablarlo de manera normalizada y respetuosa, puede ayudar a crear un vínculo erótico más potente con nuestra pareja.

La sexualidad no es un tema ajeno en una pareja, por eso también es vital hablarlo con el respeto y la importancia que se merece y las fantasías forman parte de nuestro día a día, eróticas o no.

  • Como experta en relaciones, ¿cuál es la mejor manera de trasmitir nuestros deseos sexuales?

La mejor manera es siendo sinceros con uno mismo, es decir, primero necesitamos conocernos, dedicarnos tiempo, explorarnos y saber qué es lo que nos gusta para poder transmitirlo de manera clara. Si no sabemos lo que nos proporciona placer, difícilmente se lo podremos comunicar a nuestra pareja. A las mujeres nos sigue costando mucho más que a los hombres, la religión, la cultura, los estereotipos, las falsas creencias han hecho muchísimo daño, pero poco a poco las mujeres vamos empoderandonos para poder disfrutar de una sexualidad plena.

  • ¿Qué crees que es lo más importante para sentirse satisfecho en las diferentes relaciones sentimentales que vivimos a lo largo de la vida?

Lo más importante es hacer un buen aprendizaje de todas ellas, de las que tuvimos y tenemos, es vital. Lo importante es aprender qué sucedió, qué nos gustó, qué nos hizo feliz, pero sobre todo, tener claro lo que no volveríamos a repetir, tanto de nosotros como de nuestras parejas. Eso es vital para reforzar nuestra autoestima.

Es importante tenerlo presente, e ir madurando y evolucionando con cada relación y tener presente qué cualidades buscamos en una pareja sentimental y cuáles no.

  • ¿Cuál es la clave para mantener una relación sana?

La clave de una relación sana es respetar la individualidad de cada uno, es decir, en las parejas que se fusionan siempre habrá uno de los dos que pierda algo; amigos, hobbies, tiempo.

La comunicación, la confianza y la honestidad también formarían parte, entre otras, de la composición para una relación sana.

  • El cine porno es en muchos casos la fuente principal de educación sexual y como sabemos, recurrir a determinados tipos de películas no hace más que educar en la imitación de comportamientos heteronormativos y algo rancios. Hace poco en el blog hablamos del Queerporn y otros tipos de cine que están luchando por visibilizar las diferentes sexualidades. En tu opinión, ¿es importante que surjan nuevos “actores” en el panorama del porno que introduzcan valores igualitarios y rompan con los estereotipos e imágenes que no se ajustan a la realidad?

Totalmente, el porno comercial forma parte de una industria de hombres para hombres, por eso es necesario que aparezcan nuevos actores y actrices que rompan con lo normativo pero, también es necesario que aparezcan nuevos directores y directoras que innoven, que abran el abanico de posibilidades y muestren la sexualidad en su amplitud, sin frivolidad, que no sea coitocéntrica, ni falocéntrica, y que se preocupe también de la mujer y de su placer.

  • En tu opinión, ¿ha cambiado la educación sexual en los últimos años?

En casa se sigue sin hablar de sexualidad de una manera educativa, sigue siendo preventiva (ponerse un preservativo para evitar embarazo y ETS) pero muy escasa y sin apenas explicación, además sigue habiendo mucha distinción entre chicas y chicos.

En la escuela más de lo mismo, con el hándicap de que los padres siguen pensando que si se habla de sexualidad, es hablar de genitales (qué también, pero es sólo una parte) y, por tanto, es hacer como un llamamiento a que sus jóvenes tengan relaciones sexuales, los padres siguen pensando que si no se habla, no existe y no hay nada más peligroso y alejado de la realidad.

  • Hace poco vimos en tu blog una reseña de la última película de Paco León que pareció gustarte, ¿películas como Kiki el amor se hace crees que ayudan a visibilizar las sexualidades y romper la homogeneidad?

Rotundamente sí. La película a parte está tratada con mucho cariño,  sirve para dar a conocer otras maneras de excitarse y de sentir placer. Me gustó porque al ser una película que puede llegar a muchísima gente, está tratada con muchísimo respeto y empatía y eso sólo puede ser positivo para favorecer nuestro conocimiento y riqueza personal.

  • Por tu consulta pasan muchas personas con diferentes necesidades. ¿Hay alguna duda o cuestión que veas que se repita en cuanto a la sexualidad?, ¿puede ser consecuencia de la falta de una buena educación sexual o de no disfrutar libremente de los deseos particulares?

Tengo muchísimas consultas de gente joven que preguntan sobre temas de masturbación y falta de autoconocimiento del propio cuerpo. De personas que piensan que «padecen» alguna problemática porqué tienen gustos diversos a la norma.

Y eso es muy triste, porqué con una buena educación sexual, empezando y acabando por casa, no nos encontraríamos con este sufrimiento.

  • El ritmo de la sociedad muchas veces nos repercute negativamente en la cama. ¿Cómo podemos superar el estrés diario para que las relaciones sexuales no se resientan?

Lo necesario y vital es tomar conciencia. Es decir, llegar a casa tiene que ser como llegar al refugio, al lugar donde te sientes cómodo, seguro y tranquilo y que te espera gente que te quiere y quieres y que por tanto las preocupaciones y estrés deben quedarse en la marquesina de la puerta. Con eso no quiero decir que se obvie el ritmo de vida y que no se pueda compartir, no confundamos. Lo que quiero expresar es que como pareja os debéis una comunicación asertiva y empática, sin que la otra persona sea la cabeza de turco donde descargar nuestra frustración. Una vez entendido esto, es recomendable destinar un tiempo de calidad (sin prisas, sin distracciones) tiempo para expresar nuestros deseos, ser sujetos deseados y deseantes.

  • Una de las reflexiones que hemos tenido alguna vez en Ars Eroticas es que cada vez más el sexo está más alejado de la cama y la noche como tradicionalmente se cree. El trabajo, las obligaciones… nos hacen tener que sacar tiempo incluso para disfrutar del sexo. ¿Qué opinas tú como sexóloga? ¿Es positivo sacar el sexo de la cama?

La cuestión es ¿por qué no podemos tener un encuentro íntimo y  placentero a las 3 del mediodía, si es cuando coincidimos con nuestra pareja?

Los límites, y las decisiones las ponemos nosotros mismos, y a veces tenemos que adaptarnos a las circunstancias, por ejemplo cuando aparecen los hijos. Lo importante es no frustrarnos en que debemos tener un encuentro íntimo/sexual en un momento determinado o una hora pactada.

Sacar el sexo de lo que está preestablecido es hacerlo crecer y, porque no, normalizarlo. También es normal que se lleve a cabo en la cama, porque es un sitio dentro de una habitación que nos proporciona una  intimidad y, además, es cómodo, pero no tiene porqué ser por la noche, aunque sea lo habitual ya que es cuando nos encontramos con nuestra pareja. Yo creo que lo bonito del sexo es que no hay reglas preestablecidas, por eso creo que se deben buscar momentos donde fluyamos y nos sintamos a gusto, sin pensar si es de día, de noche, lunes o sábado.

  • Todavía hoy en día se mira con desconfianza a los juguetes sexuales, a la masturbación en solitario cuando se está en pareja o a determinadas prácticas sexuales. Son resquicios de una mentalidad que hasta ahora no hemos conseguido erradicar. ¿Qué les dirías a las personas que siguen manteniendo esos pensamientos?

El problema no está que una persona de 60 años pueda tener esos pensamientos sobre la sexualidad en general, aunque se podrían modular si se quisiese. El verdadero problema está en cómo se educa actualmente en materia de sexualidad. Si concebimos la sexualidad como genitalidad y siempre desde un prisma clínico preventivo. No el autoconocimiento, en emociones, en cogniciones en cambios a nivel holístico del ser humano y no sólo en el campo biológico.

  • ¿Cuál es tu consejo para disfrutar de una sexualidad plena y sana?

Mi mayor consejo es que las personas aprendan, experimenten, se autoexploren, se quieran, se adoren y que disfruten sin tabúes, sin prejuicios, sin ser tiranos de sus propios cuerpos.

Cristina Callao sexóloga