Lo que tienes que tener en cuenta para acertar con un juguete para parejas

Podemos decir que el uso de juguetería en adultos está más normalizada y naturalizada. Sin embargo, todavía hay muchas parejas a las que elegir un juguete erótico o introducirlo en sus rutinas eróticas les sigue provocando roces. Hacerlo no siempre es fácil, por eso hay que tener en cuenta una serie de cosas para no acabar con él encerrado en un cajón

¿Has discutido alguna vez por un juguete erótico? Últimamente me encuentro que en las relaciones de pareja uno de los motivos de discusión es por el uso, o la reticencia a no usarlos, de productos o complementos eróticos. La mayoría dudamos sobre dónde comprar juguetes de calidad o si realmente van a ser útiles. Os voy a hacer un spoiler, este tipo de productos pueden ayudar pero no son milagrosos, no solucionan problemas de pareja simplemente por meterlos en la cama con nosotras.

Preguntas que debes hacerte antes de comprar un juguete

Esto no va de plantarnos en una web o una tienda y comprar lo que más nos llame la atención. Esto puede acabar siendo negativo porque nos llevamos algo que no nos gusta usar, no se adapta a nuestras necesidades o lo compramos por impulso sin saber realmente si iba con nosotras. Antes de lanzarnos a comprar un producto erótico para parejas debemos tener en cuenta una serie de cosas:

  • ¿Estáis las dos partes de acuerdo con el uso de juguetes o accesorios? Antes de entrar a una web de confianza donde encontrar productos que sean de calidad, debemos mantener una conversación sincera sobre por qué queremos usarlos y si todas las partes están de acuerdo con su uso.
  • Es importante pensar para qué lo vamos a usar. Es decir, en qué tipo de prácticas lo vamos a utilizar. Si es para mejorar alguna, introducirnos en algo nuevo o experimentar. Así el porcentaje de acierto será mayor ya que hay tantos productos que a veces es difícil dar con el que queríamos de verdad.
  • Preguntaos sobre qué cualidades son importantes que tenga el producto para vosotras. Si no os gustan algunas formas, materiales o texturas por ejemplo. Además de los tipos, tienen funciones diferentes y maneras de activarse. Si os importa el medio ambiente os gustará saber que el uso de pilas ya es residual y que podéis elegir productos más sostenibles.
  • Olvidad la vergüenza. En muchas tiendas tanto online como físicas las personas que están detrás están preparadas para escuchar vuestras necesidades y aconsejaros para que acertéis con la compra. Y sino, una sexóloga os puede acompañar en esta decisión teniendo en cuenta cómo es vuestra relación de pareja.

Lo que NUNCA debes hacer en pareja

Vivimos en un momento en el que usar juguetería es muy común y hay juguetes que se han popularizado tanto que creemos que todas debemos tener uno en la mesilla. Eso ha llevado a muchas parejas a regalar un succionador, un vibrador o cualquier otro juguete. ¿Y cuál ha sido la sorpresa? que se han quedado con cara de póker porque no lo deseaban o porque se sienten presionadas a usar juguetes. Por eso:

  • Nunca presiones a tu pareja ni te dejes presionar para usar un producto erótico.
  • No elijas por ella o él a no ser que sepas muy muy bien que es lo que quería.
  • No le lleves a una tienda erótica de sorpresa si no estás segura o seguro de que se sentirá cómodx.

No todo son vibradores fálicos

Otra de las grandes creencias que seguimos teniendo es que los juguetes son todos penetradores. Es decir, que están hechos para un orificio. Esto está muy anticuado tengo que deciros. Hay muchísimos tipos y si no nos gusta lo realístico o con forma fálica, no pasa nada, porque hay tantas formas y diseños diferentes que será fácil encontrar una solución. Además, no todo son juguetes, sino que hay muchísimos complementos que pueden hacer de nuestros encuentros algo diferente, divertido y especial. Lo importante es jugar con los sentidos, buscar nuevas formas de sorprendernos, invertir tiempo de calidad en las relaciones y no dar por hecho absolutamente nada.

Haz un poco de investigación en tiendas online para ver que hay productos diferentes, que grandes marcas están trabajando para ofrecer otras alternativas como el slow sex o el juego a partir de nuevas zonas sensoriales. Y nunca dudes en preguntar si te surge alguna duda.

No dejes que tu juguete se muera en el cajón, compra con cabeza.

Ars Eroticas

Las sustancias que tu cerebro te manda para que pierdas la cabeza

¿Te has preguntado alguna vez qué sustancias segrega tu cerebro para que recibas la sensación de placer? o ¿por qué después te apetece darte mimos o querer más sexo? ¡Tenemos la respuesta!

Seguro que muchas veces has oído decir que somos pura química, y algo de razón tiene esa frase. También habrás oído que el placer está en el cerebro y es verdad que es una parte imprescindible para sentir orgasmos, placer, deseo y excitación. El cerebro es el que se encarga de descifrar y traducir lo que recibimos a través de los sentidos y el sistema nervioso. Concretamente es el sistema límbico el que se activa durante el sexo y nos hace sentir todo ese placer que sentimos al tocarnos y ser tocadas. Podemos decir que somos un circuito de doble sentido que va desde lo físico a químico y viceversa. Es decir, que el cuerpo y el cerebro tienen ese doble sentido en el que se envían información para que podamos disfrutar plenamente.

El cerebro segrega sustancias del placer

¿Y cómo sucede esto? con las sustancias que el cerebro segrega al recibir las señales de los sentidos y el sistema nervioso. Seguro que te sonará la dopamina y la oxitocina, pero, ¿has oído hablar alguna vez hablar de la noradrenalina, la prolactina o la serotonina? Pues tienen una gran importancia ya que por ejemplo la segunda hace que después del sexo tengas ganas de abrazos, besos y sentir el cuerpo de la otra persona.

El cerebro segrega sustancias que nos hacen sentir placer

¿Quieres saber cómo funciona le cerebro con el sexo?

Os cuento todo esto brevemente y de manera muy resumida porque hace unos días Marta Villena me entrevistó para hablar de ello en Europa FM y por fin ha salido el artículo. Os lo dejo en el botón de abajo para que podáis poner a puesta vuestra química y disfrutar más.

Con la objeción de conciencia hemos topado | El aborto en España

Para mí, esto era una bomba de relojería que estaba marcando la cuenta atrás para estallar y por fin lo ha hecho. Ahora la pregunta es, ¿cambiará algo de verdad en cuanto al aborto en España?

Hace algún tiempo me cuestioné cómo era la situación en nuestro país, cómo eran los procesos, qué opciones había y si viviéramos en la comunidad autónoma que viviéramos teníamos la libre decisión de abortar. Esa pequeña investigación me llevó a guardar una página en los marcadores de mi ordenador que llamé Aborto, así a secas y de forma muy genérica. Algo con tantos matices, tantas pieles, sentimientos y culpabilidades metido en una carpeta con una palabra que genera polémica con sólo escribirla. Ahí se agolpaban datos de las opciones que hay para abortar en España, por comunidades, por clínicas… El otro día, escuchando todo el revuelo generado alrededor de este tema, recordé el reportaje que Gonzo hizo la LaSexta con unas cuantas mujeres que habían vivido en su piel la negativa ante la práctica del aborto y que se habían sentido abandonadas, estafadas y repudiadas por el sistema de salud español. Y mi carpeta. Esa que dejé ahí porque, para que engañarnos, me daba respeto abrirla y sacar todo lo que guardé dentro. Como si tuviera temor a no saberlo manejar.

En cinco de las 17 comunidades autónomas de España —el equivalente a los estados— ningún hospital público ofrece abortos, según las estadísticas más recientes del gobierno. 

The New York Times

Desde 2010 en España se liberalizó la legislación sobre el aborto. Esto quiere decir que se eliminaba la restricción de que sólo salvo excepciones se practicaría. Desde 2010 las mujeres podemos decidir interrumpir un embarazo en las 14 primeras semanas sin restricciones. Si nos dejan claro. Porque esto es lo que ha hecho que todo esto estalle, que el derecho pueda ejercerse. Porque ante la objeción de conciencia hemos topado. La ley dice una cosa, pero los profesionales dicen otra, más bien dicen en su mayoría que se niegan y que tienen su derecho a hacerlo. Y esto es lo que ocurre, que a pesar de ser una conquista legal, en muy pocos sitios podemos hacerlo de forma libre en un hospital público. La mayoría de ellos nos alargan los procesos, nos hacen pasar situaciones inhumanas para acabar en un centro concertado en el que, si tenemos suerte, nos tratarán bien y cumplirá con las condiciones sanitarias. Esto último, según alguna experiencia que pudimos ver en el programa de LaSexta, no siempre es así.

Hasta 8 provincias españolas no han practicado abortos en 30 años

(Hecha un vistazo al mapa interactivo que han creado)

Newtral

Mientras escribo esto me acuerdo del anterior post que escribí sobre la «Ley del latido», del aborto en Texas, y cómo nos llevamos las manos a la cabeza por esa aberración, cuando lo que estamos haciendo aquí no es mucho mejor. Y pienso mucho en esas mujeres que han tenido que pasar por eso, que estos días están en esa vorágine administrativa para que les practiquen un aborto y que se sienten mal. Porque aunque sea una decisión libre, sea por la razón que sea, la culpabilidad que la sociedad nos hace sentir es grande.

Os voy a hacer un spoiler y os pido perdón de antemano. En HBO ha comenzado el remake de la película Secretos de un Matrimonio de Ingmar Berman pero en formato serie y en el primer capítulo descubrimos que ella está embarazada pero que en realidad no quiere tenerlo. La última parte de ese capítulo va precisamente de eso, de ese duelo matrimonial y personal de decir no a la maternidad y de cómo, aunque es algo que has decidido libremente y tienes tus razones, te hace sentirte triste, dolida, las dudas te comen y la presión social se te clava en el alma para siempre.

Algunas personas creen que las mujeres abortamos por gusto. Como si nos apeteciera hacerlo de vez en cuando. Las mujeres abortamos porque queremos (y en muchos casos tenemos que hacerlo), porque es nuestra decisión y debemos tener ese derecho cubierto, no solo por la ley sino por profesionales respetuosos. Las razones por las que lo hacemos no le incumbe a nadie, bastante tenemos con el castigo social que recibimos las mujeres por tomar decisiones libre sobre nuestra vidas y cuerpos.

Dónde abortar en España sin problemas

Fui a sacar mi carpeta, esa que guardé tanto, pero resulta que todo lo que había dentro había expirado. Vaya, ¡qué sorpresa! parece que no sólo se ataca con la objeción de conciencia. Como no me iba a quedar así después de todo esto, aquí te dejo un link donde puedes ver dónde abortar en España. Además, está la opción de ver las clínicas por Comunidades Autónomas. Se informa de los procedimientos para que lo puedas leer en casa tranquilamente, hablan de la legislación y puedes optar por un asesoramiento personal.

En Compostela se fala de sexo sen tabús

Que sí, que sí. En Santiago de Compostela hemos organizado una actividad para que nos podamos reunir a hablar de relaciones, de sexualidad, de menstruación… de lo que nos preocupa y apetezca.

Es complicado y muy difícl que la sexualidad forme parte de la agenda pública. Sin embargo, estáis ante una cabezona de primera. Llevo tiempo queriendo poner en primera fila esas conversaciones que tanto nos ayudan para ver que lo que le ocurre a una, nos ocurre,generalmente, a todas. Las dudas sobre la educación sexual, sobre los traspiés en las relaciones de pareja, sobre el deseo, el placer y tantas otras cosas.

Café sen tabús

En ArsEroticas creamos este espacio en un grupo de Whatsapp para mujeres donde compartimos todas estas inquietudes y nos acompañamos. También nos hacemos recomendaciones y grandes descubrimientos. Pero, ¿por qué no llevarlo a algo físico? Gracias al apoyo del Centro Socio Cultural de Santa Marta y al Concello de Santiago de Compostela, vamos a tener ese espacio.

  • Nos veremos un miércoles cada 15 días
  • De 10 a 11:30 de la mañana
  • Es Gratuito
  • Puedes inscribirte en el Centro Sociocultural o preguntándome a mí.
Café sen tabús, espacio para mujeres en Santiago de Compostela

Ley del aborto en texas y los desderechos de las mujeres

¿Te imaginas que te impidan abortar desde antes de que sepas que estás embarazada? This is Texas baby

Llevamos unos días con la ley del aborto de Texas a vueltas. Hay mucha información que nos llega y que nos ha hecho poner el foco en el continente americano. Hace días que quiero ponerme a ello y justo a la amore le llegó La Wickly de Emilio Doménech que lo explica bastante bien. Así que vamos a ver si arrojamos luz sobre este asunto.

Con septiembre entró en vigor la Ley del interrupción del embarazo en Texas, una ley que prohíbe interrumpir la mayoría de los embarazos después de las seis semanas de gestación. Aunque nos llame la atención con esta nueva noticia, en 1973 se estableció el derecho a practicarse y es ahora, en 2021, cuando se ha cambiado para restringir el derecho de las mujeres. ¿Por qué ocurre esto entonces? ¿Por qué en vez de avanzar parece que estamos retrocediendo en derechos? Pues porque realmente no hay una ley aprobada por el cuerpo legislativo y entonces todas las decisiones pasan por el poder judicial que sigue la ley que marcó predecente. Aquí tenemos la ley del 73 que marcó el precedente, pero… si la corte falla en contra de una sentencia, el acceso a algunos derechos puede cambiar. Ahora mismo hay una corte de signo conservador y eso ha hecho que esta ley sea así de restrictiva con el derecho al aborto.

Roe v. Wade es el nombre de un caso judicial de 1973 en el que el Tribunal Supremo falló a favor de despenalizar el aborto inducido en el país. 

Según La Wicly de Emilio Doménech

Esto no sólo ocurre a en Texas, también sucede en otros estados, pero se enfrentan a impugnaciones legales. Lo que ha sucedido en Texas es que se negó justo antes de la medianoche del miércoles a bloquear la ley.

Según el New York Times, «debido a la manera en que se escribió la ley, puede ser difícil de impugnar en los tribunales, lo que representa un cambio radical en la batalla por el derecho al aborto e invita a que otras jurisdicciones también intenten limitar el acceso al procedimiento».

Las diferencias en la ley del aborto en Texas

Con esta ley se prohíben los abortos una vez que se pueda detectar actividad cardiaca en el embrión. Esto suele ocurrir alrededor de la sexta semana de embarazo. Muchas mujeres no saben en ese tiempo que están embarazada porque no tengan ciclos menstruales regulares, no lleven bien las cuentas de sus menstruaciones o cualquier otra razón. Además, según los expertos, ese «latido» es una actividad eléctrica y en muchos casos aun no están ni formadas las válvulas del corazón. Lo que quiere decir que hay actividad, pero no que el embarazo sea viable. Así que estamos poniendo en una tesitura difícil a una mujer que no sabe si en realidad su embarazo seguirá adelante (y si ella quiere seguir con él) o no.

Esta ley no admite excepciones en caso de violaciones o incesto, sólo cuando hay un riesgo de la salud de la gestante o el feto. Es decir, que las excepciones son muy reducidas. Incluso si hilamos más fino, no deja claro en qué situaciones tiene que estar la gestante en cuanto a peligrosidad de su salud, para poder permitir el aborto.

Otra de las cosas «curiosas» de esta ley es que cualquier ciudadano o ciudadana puede hacer una denuncia sobre un aborto. Como lo oyes. «Texas faculta a los ciudadanos particulares a demandar a cualquiera que practique un aborto o que “ayude a realizarlo”. Los demandantes que no tienen ninguna relación con la paciente o la clínica pueden demandar y recuperar los honorarios legales, así como 10.000 dólares si ganan», según el New York Times.

 La medida creará obstáculos casi insuperables para ciertas poblaciones vulnerables, como las adolescentes, que a menudo no se dan cuenta de que están embarazadas hasta que el embarazo está más avanzado; la población de bajos ingresos, que necesita reunir alrededor de 550 dólares para cubrir el costo del procedimiento; las personas de color y los inmigrantes sin estatus legal.

New York Times

Esta ley afecta en mayor medida a las adolescentes que no suelen darse cuenta de su estado hasta que es avanzado y a mujeres con recursos limitados que tardan tiempo en reunir el dinero para poder costearse el procedimiento. Así como a la población negra que goza de menos derechos, más restricciones o que no tienen la posibilidad de trasladarse a otros estados donde poder realizarlo y por ello sufren una mayor tasa de mortalidad materna.