Amores pasajeros

Aunque el título puede resultar algo familiar, estas palabras me han hecho pensar en aquellos amores que nos han marcado, que se fueron y nunca volverán, que están siempre en nuestras mentes y que a veces parecen volver y nunca terminamos de olvidar. Y todo esto me hace reflexionar, ¿qué es lo que hace que un hombre o una mujer que pasó por nuestra cama se nos quede marcado más que otros?

Supongo que depende mucho del momento en el que aparezca. Cuando alguien aparece en una etapa de nuestra vida en la que solo queremos disfrutar del momento lo usamos y tiramos. Sin embargo, hay momentos en los que nos gustaría que esa persona permaneciera más tiempo junto a nosotros, pero no encaja con sus planes del momento. Y es que, qué complicado es estar en el sitio adecuado en el momento preciso.

En cuanto a los amores que van y vienen, cuando los tiempos no coinciden y para uno de los dos hubiera sido algo más, cuando el pasajero ocasional quiere volver al tren, ¿está bien dejarle montar de nuevo?. En esos momentos aparecen las dudas que creíste resolver, las inseguridades, los recuerdos… y son muy, pero que muy peligrosos.  Por que si nos hizo daño, no supo hacer las cosas bien y encima no es capaz de reconocerlo, podemos estar ante una situación en desigualdad y muy tóxica para la persona que cometió el error de engancharse.

Por ello, en este blog muchas de las entradas versan sobre el amor libre y el libre compromiso. Quiero decir, que no todo tiene que tener un nombre, ni tiene que estar escrito. Somos personas individuales y libres cuyos antojos y apetencias varían cada día. ¿Y si yo quiero estar toda una temporada solo con una persona y luego también tener la opción de disfrutar de otras ocasionalmente?. Eso socialmente se vería como una infidelidad y es cierto que por la educación que la mayoría hemos recibido nos haría sentir mal y podríamos herir a alguien. Por eso, no puedo dejar de pensar por qué no podemos librarnos de ese peso de hacer las cosas «bien» si yo no quiero hacerlas bien ni mal, solo quiero hacer lo que me apetezca en el momento. Lo que sí debemos tener claro es que la comunicación es indispensable, y ya estemos en una relación cerrada o abierta hay que obligarnos a tener una conversación para que todas las partes sepan lo que hay.

Imagen

No conocemos muchas experiencias en las que las relaciones sean abiertas y lo vivan con total normalidad, así que si has vivido o vives alguna situación así puedes contarnos tu experiencia.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.