Tiene alas y no es un pájaro. Serpentea y no es una serpiente. Zumba y no es una mosca. ¿Qué es?
¡EVA!
Eva es uno de los estimuladores más compactos, versátiles y bonitos que hay. Y lo digo muy segura, por eso he tardado tanto en escribir este post, porque la he testado a conciencia para conocerla bien y poder presentárosla. Eva es muy entrañable, parece inofensiva por su aspecto pequeño y delicado, pero es un juguete de lo más sofisticado (a pesar de su sencillísimo uso).
¿Qué o quién es Eva?
Os presento a Eva II, una de las últimas novedades de Dame Products, un proyecto que enamora nada más conocerlo. Dos mujeres al frente de una empresa que piensa en el PLACER Femenino. Sí, así con mayúsculas, porque tienen pocos productos pero muy bien pensados y diseñado para personas con vulva.
Eva es un vibrador fabricado en silicona pensado para parejas. En principio para parejas heterosexuales, para que este bichito estimule la vulva, concretamente el clítoris mientras se está jugando e incluso durante la penetración. Pero ya sabéis que aquí a todo le damos la vuelta así que la hemos probado en relaciones sexuales entre dos personas con vulvas.
Su cuerpecito es muy sencillo, una parte principal donde va el mecanismo y las dos alas. ¿Para qué son las alas? para que se quede encajada entre los labios de la vulva. Eva viene, se prepara, pliega sus alas se acurruca entre los labios y se expande para no moverse de ahí ni con los ritmos de vibración más altos ni si te apetece ponerte a hacer piruetas.
Una vez en su posición en su cabeza tiene una parte que podemos presionar para que empiece a trabajar, que a veces se acomoda y se hace la vaga. Le damos una vez y empieza la fiesta. Tiene tres ritmos, de menor a mayor intensidad. Es un juguete manos libres, ya que una vez puesta no hace falta tocarla más. Ella solita se encarga de todo y tú, solo tienes que disfrutar.

Eva y las mujeres
Como os decía Eva está pensada para disfrutarla en soledad o en parejas, no indica que sea exclusivamente para heterosexuales (en el caso de las parejas), pero por su forma y modo todo indica que sí. Pero en ArsEroticas le hemos dado la vuelta y la hemos puesto a prueba. Y ha pasado la prueba.
En primer lugar por el juego que ofrece. Al ser un juguete tan discreto y llamativo hace que se genere un juego muy rápidamente. Es como si recibiéramos una visita, una invitada a jugar. Una se la coloca y la pone en marcha mientras los juegos van surgiendo. La excitación va aumentando y ahí está participando disimuladamente. Se puede tocar un poco para cambiar el ritmo o para rozarla más intensamente contra el clítoris.
En pareja
Con ella, y al ser tan cómoda, se pueden combinar otros juguetes como un dildo si nos apetece una penetración u otro tipo de juguete. Eso sí, yo os recomiendo algo liviano o sin vibración para no distraer demasiado a los sentidos. Pero si queréis divertiros de verdad con ella, probad a ponérosla mientras estáis en casa (o fuera para las atrevidas). Por ejemplo, esa mañana que vais a pasar haciendo tareas y ordenando, póntela o que se la ponga ella y que el ritmo le acompañe. Es muy divertido.
En solitario
Si te apetece tener un momento para ti y además cambiar la manera de cómo te sueles masturbar prueba a ponerte a Eva y activarla. ¡Fuera manos del pubis y vulva! déjate sentir y si usas las manos que sea para que recorran otras partes del cuerpo, pero esa está prohibido. Mueve la cadera y balancea porque este movimiento hace que la excitación suba y así ayudamos a que Eva cumpla con su función. Poco a poco irás sintiendo el placer y no necesitarás más que sentir-te.

Si te ha gustado aquí puedes conseguir una igual a la mía