¿Te imaginas que te impidan abortar desde antes de que sepas que estás embarazada? This is Texas baby
Llevamos unos días con la ley del aborto de Texas a vueltas. Hay mucha información que nos llega y que nos ha hecho poner el foco en el continente americano. Hace días que quiero ponerme a ello y justo a la amore le llegó La Wickly de Emilio Doménech que lo explica bastante bien. Así que vamos a ver si arrojamos luz sobre este asunto.
Con septiembre entró en vigor la Ley del interrupción del embarazo en Texas, una ley que prohíbe interrumpir la mayoría de los embarazos después de las seis semanas de gestación. Aunque nos llame la atención con esta nueva noticia, en 1973 se estableció el derecho a practicarse y es ahora, en 2021, cuando se ha cambiado para restringir el derecho de las mujeres. ¿Por qué ocurre esto entonces? ¿Por qué en vez de avanzar parece que estamos retrocediendo en derechos? Pues porque realmente no hay una ley aprobada por el cuerpo legislativo y entonces todas las decisiones pasan por el poder judicial que sigue la ley que marcó predecente. Aquí tenemos la ley del 73 que marcó el precedente, pero… si la corte falla en contra de una sentencia, el acceso a algunos derechos puede cambiar. Ahora mismo hay una corte de signo conservador y eso ha hecho que esta ley sea así de restrictiva con el derecho al aborto.
Roe v. Wade es el nombre de un caso judicial de 1973 en el que el Tribunal Supremo falló a favor de despenalizar el aborto inducido en el país.
Según La Wicly de Emilio Doménech
Esto no sólo ocurre a en Texas, también sucede en otros estados, pero se enfrentan a impugnaciones legales. Lo que ha sucedido en Texas es que se negó justo antes de la medianoche del miércoles a bloquear la ley.
Según el New York Times, «debido a la manera en que se escribió la ley, puede ser difícil de impugnar en los tribunales, lo que representa un cambio radical en la batalla por el derecho al aborto e invita a que otras jurisdicciones también intenten limitar el acceso al procedimiento».
Las diferencias en la ley del aborto en Texas
Con esta ley se prohíben los abortos una vez que se pueda detectar actividad cardiaca en el embrión. Esto suele ocurrir alrededor de la sexta semana de embarazo. Muchas mujeres no saben en ese tiempo que están embarazada porque no tengan ciclos menstruales regulares, no lleven bien las cuentas de sus menstruaciones o cualquier otra razón. Además, según los expertos, ese «latido» es una actividad eléctrica y en muchos casos aun no están ni formadas las válvulas del corazón. Lo que quiere decir que hay actividad, pero no que el embarazo sea viable. Así que estamos poniendo en una tesitura difícil a una mujer que no sabe si en realidad su embarazo seguirá adelante (y si ella quiere seguir con él) o no.
Esta ley no admite excepciones en caso de violaciones o incesto, sólo cuando hay un riesgo de la salud de la gestante o el feto. Es decir, que las excepciones son muy reducidas. Incluso si hilamos más fino, no deja claro en qué situaciones tiene que estar la gestante en cuanto a peligrosidad de su salud, para poder permitir el aborto.
Otra de las cosas «curiosas» de esta ley es que cualquier ciudadano o ciudadana puede hacer una denuncia sobre un aborto. Como lo oyes. «Texas faculta a los ciudadanos particulares a demandar a cualquiera que practique un aborto o que “ayude a realizarlo”. Los demandantes que no tienen ninguna relación con la paciente o la clínica pueden demandar y recuperar los honorarios legales, así como 10.000 dólares si ganan», según el New York Times.
La medida creará obstáculos casi insuperables para ciertas poblaciones vulnerables, como las adolescentes, que a menudo no se dan cuenta de que están embarazadas hasta que el embarazo está más avanzado; la población de bajos ingresos, que necesita reunir alrededor de 550 dólares para cubrir el costo del procedimiento; las personas de color y los inmigrantes sin estatus legal.
New York Times
Esta ley afecta en mayor medida a las adolescentes que no suelen darse cuenta de su estado hasta que es avanzado y a mujeres con recursos limitados que tardan tiempo en reunir el dinero para poder costearse el procedimiento. Así como a la población negra que goza de menos derechos, más restricciones o que no tienen la posibilidad de trasladarse a otros estados donde poder realizarlo y por ello sufren una mayor tasa de mortalidad materna.